CÁPSULAS DE CURACIÓN ESPIRITUAL.
Se habla del alma a la gente y algunos preguntan ¿qué es el alma? Has tenido alguna ocasión de comprobar su existencia?
Si tu no crees en el alma, te diré que cuando un hombre o una mujer desencarna se van desposeyendo por ley cíclica de todos sus vehículos quedando ese ser inmortal que somos llamado el Yo Superior o el Ego Espiritual, para diferenciarlo del ego inferior o material. Y en ese ser que se recicla y que nunca muere es donde se encuentra toda la sabiduría tomada de la experiencia de las vidas en los diferentes planos de manifestación.
El ego que se reencarna toma al reencarnarse un nuevo vehículo mental, un nuevo vehículo emocional, un nuevo cuerpo físico, un nuevo cerebro físico. Este ego inmortal transmitirá a sus nuevos vehículos de experimento y de expresión. las potencialidades adquiridas por las experiencias pasadas.
No es posible que, por ejemplo, un nuevo cerebro físico tenga recuerdos de una existencia material pasada. Si queremos buscar esa memoria, esa historia que somos, entonces la repuesta la encontraremos en esa esencia divina que somos y que nunca muere. Pero para ello tenemos que fijar nuestra atención, no hacia afuera sino hacia adentro, y cuando contactemos con esa esencia divina, con ese ego inmortal, con ese Yo Superior, encontraremos ahí todos los registros y respuestas de quienes somos. En ese momento se descubre que somos almas encarnadas. Benditos sean.
El alma humana puede ser considerada como el principio inteligente, la mente superior y la mente causal, el principio cuya cualidad es discernir, clasificar, incluir, excluir, dirigir, aceptar, rechazar. El alma es una entidad de luz pura contenida dentro de una materia física. Durante todo el período de la vida, el alma es una entidad de luz que colorea la forma y dirige todos los aspectos durante toda esa vida de ese ser que llamamos humano.
El alma es una entidad de luz que contiene una vibración inteligente y determinada, y que distingue, según su cualidad, a cada uno de los componentes de la raza. Debido a estas cualidades inherentes al alma, ésta reconoce tres aspectos o componentes distintos: la capacidad a través del alma de reconocer a Dios, la capacidad de reconocer al grupo al cual pertenece, y la capacidad de reconocerse a sí mismo cuando esta alma humana reconoce a Dios.
Cuando es consciente de sí mismo, pasa por una etapa necesaria para al superarla poder tener acceso a las etapas más elevadas.
Este desenvolvimiento e inspiración hacia buscar la unidad, el universo, la vida una, el sistema solar, el sol, etc., será la respuesta lógica del esfuerzo producido por poner sus ojos y su interés en esos aspectos elevados. Cuando el alma humana nuestra se reconoce únicamente a sí misma esto significa un nivel de medición para colocar el desarrollo evolutivo de ese ser humano.
La conciencia del hombre y de la mujer está formada por todo aquello que conocen, está formada por todo aquello con lo que se han puesto en contacto a través de la experiencia de la vida.
El mundo externo y su ciencia estudia y divide la conciencia en tres puntos:
1.- La subconsciencia o el subconsciente donde están contenidas todas las experiencias del pasado las cuales yacen profundamente enterradas pero sumamente influyentes dentro de la manifestación.
2.- El consciente o la conciencia que contiene y se refiere a todas las experiencias del presente .
3.- La superconsciencia o superconsciente también llamada Desenvolvimiento Superior por cuya adquisición siempre está luchando el hombre.
La conciencia del hombre posee tres distintos estados diferentes mientras está en la vida.
a) La conciencia individual o personal, que es el conocimiento o conciencia de existir y de reconocerse y ser un foco de luz inteligente con poderes para hacer uso de sus energías, de sus facultades y de su libre albedrío, con el cual crear un plan de vida y de acción individuales .
b) La conciencia grupal o de masas, en la cual todo pensamiento y todo sentimiento y toda virtud y vicio contribuyen a reforzar en esa conciencia grupal, tal o cual cualidad en lo particular.
c)La conciencia de maestro ascendido en la cual la autoconsciente inteligencia del individuo ascendido crea por voluntad propia y por poder dirigidos, todo acto a través del pensamiento, el sentimiento y la palabra hablada, todo acto que no contiene más que perfección, sabiduría y amor; creándolo a su voluntad para cuando ese ser alineado al plan, intermediario del plan, enlace del plan, y expresión del plan, crea conveniente aplicarlo en el momento que él desee.
Las diversas energías que actúan en el ser humano y producen su desenvolvimiento constituyen su campo de experiencia. Estas dos palabras: desenvolvimiento y experiencia deberían estar siempre vinculadas, porque de una deriva la otra. Mientras persista el sometimiento a la experiencia en el mundo físico, tendrá lugar un desenvolvimiento paralelo en la conciencia de orden físico, debido a que este desenvolvimiento origina constantes cambios de comprensión y la continua y constante reorientación hacia nuevos estados de conciencia. Esto originará necesariamente nuevos estados del ser, nuevas experiencias, nuevos fenómenos; de allí la frecuente reacción del discípulo de hoy al hecho de que no hay aún para él un lugar de paz.
La paz fue el objetivo de las pirámides de antes, la realización es el objetivo del discípulo de hoy, el cual no puede permanecer estático ni descansar. Constantemente se ajusta a nuevas condiciones, continuamente aprende a actuar en ellas para luego encontrar que desaparecen dando lugar a otras nuevas, esto permanece hasta establecer la conciencia en el yo, en el ego, entonces el iniciado observa el fenómeno de la vida encontrándose como una unidad sosegadora en este plano.
Cambia de un estado de unidad a uno de dualidad para luego regresar a uno de unidad más elevada. Primeramente, el yo se identifica con su cuerpo a tal grado de creer ilusoriamente que el yo es el cuerpo, tenemos entonces al cuerpo físico representando aparentemente todo lo que existe. A esto se agrega cuando el alma comienza a ser consiente de sí misma al mismo tiempo que la forma física, entonces hablamos en términos de dualidad. Podemos mencionar que aquí conocemos los términos del yo superior y el yo inferior, del yo y sus envolturas del yo y del no yo; luego, gradualmente, muy lentamente, cambia el punto de equilibrio y el alma parece empezar a dominar. Los aspectos de la conciencia parecen trasladarse al más elevado de los dos aspectos superior e inferior; aun así, el hombre se identifica a veces con su alma y a veces con su cuerpo.
Pero llega un momento en que el iniciado se da cuenta que existe el alma, y entonces viene el grado superior de unidad,. En el aspecto dual de la vida-cuerpo-alma, se encuentran ahora muchos discípulos, y tendrán que trabajar mucho para tener acceso a los grados superiores de unidad.
ES
HOY!. Por eso les pido que la intensificación de la luz del cosmos hacia
la Tierra sea continua. Y así es, a pesar de que sospechemos todo lo contrario.
Cuando sucede?, entenderemos mejor una frase conocida por nosotros que dice: “en tu Luz veremos la Luz”.
Cuando el ser humano, la raza humana, tome conciencia, conocimiento y comprensión de las dimensiones del espíritu y del reino en el cual mora y actúa su alma, sufrirá un cambio en los asuntos de la vida y las actividades cotidianas, y veremos el advenimiento de un nuevo cielo y de una nueva tierra. Cuando el ser humano se de cuenta de la existencia dentro de la forma de esta entidad central contenida en el Alma, en ese momento comenzará, se iniciará, el Reino, el advenimiento de la Ley Divina en la Tierra, ley impuesta sin restricciones ni rebeldía. Paralelamente, que los intelectuales, científicos y pensadores del mundo, serán fusionados, serán unidos y a partir de ahí empezarán a manifestar la conciencia grupal, cosa que les permitirá ir poco a poco reconociendo los propósitos del Espíritu Divino en la Tierra.
Se nos dice que tratemos de practicar la Conciencia Crística para la humanidad, se dice que sea motivo del diario vivir: practicar y transmitir la conciencia del Cristo, la conciencia que tiene que ver con el amor puro y divino, para que de esa manera, al ser representantes de la actividad Crística en la tierra, el Reino de Dios y el Reino del Amor se instalen ya, pues los tiempos urgen.
La substancia mental de la Tierra como planeta, de la cual forman parte las mentes de todos los seres humanos y en la cual nuestra mente está contenida en una pequeña fracción, forma a la vez parte de la mente del Cristo Cósmico. Y cuando el ser humano, merced a su evolución, tome conciencia grupal y sintonice con ese volumen contenido en la atmósfera de la Tierra, emanada de la mente del Cristo Cósmico, se agrandará el hombre; y debido a su camino, tal comprensión, reconocimiento e iluminación tendrá su mente, que a partir de ahí no le quedará duda a ningún humano y quedará fuera de toda controversia la existencia en cada senda humana del espíritu contenido en todos y cada uno de los Hijos del Creador.